Cuando hablamos de alimentación y actividad física, muchas veces se nos viene a la cabeza deportistas o personas que se cuidan asistiendo a un gimnasio para ejercitar.
La actividad física, está directamente relacionada a nuestro día a día, a las actividades
laborales que desarrollamos como parte de nuestra rutina diaria; las personas con actividades
sedentarias, requieren menos energía para poder completar su día con éxito; mientras que las
mismas personas con actividades intensas requieren de mayor consumo de energía para completar el día a día.

RECUERDA: El consumo de alimentos es directamente proporcional a la actividad física que realizas durante la jornada laboral.

¡Limitar nuestro consumo de alimentos, no es la solución para controlar el sobrepeso!